Yoongi trabaja en la misma empresa desde que la conoció, al parecer tiene su propia oficina y asistente, él es realmente importante.

Jimin odia ese lugar, todos son competitivos y arrogantes, igual que su novio. Pero Jimin no odia a Yoongi, no después de todo.

Jimin está perdidamente enamorado de Yoongi. Y sabe que Yoongi igual lo ama a él. Son él una para el otro, siempre lo han sido.

Por eso sabe que las cosas que Yoongi hace son por su bien, porque quiere verlo bien. Así que deja de preguntarse sí algún día tendrán ellos sus propios bebés, sabe que sí no lo hacen es por su bien.

- ¿Jimin? - el chico más alto lo busca en la cocina, donde siempre suele estar. Pero Jimin no está ahí, tampoco en su habitación ni el resto de la casa.

Jimin está en el patio.

- ¿Qué haces aquí? - se sienta a su lado en las sillas del jardín.

- Quería un poco de aire, casi no he salido además de para hacer las compras.- secretamente es un reproche.

Yoongi lo comprende, pero no quiere hacer nada para cambiarlo.- ¿Sabes? - continúa Jimin.- Quisiera ver a mi familia

- ¿Ir a Busan?

- Claro.

- Es una locura, bebé.- oh no, Yoongi ha usado esa palabra.- Ven, vamos a hacer algo mejor que estar sentados.

Por primera vez en mucho tiempo, Jimin se siente bien cuando hacen el amor.